Algunas veces no es grato ser bueno. Ser bueno puede llegar a ser algo horrible. Y te lo digo sabiendo que quizá te parezca una afirmación muy contradictoria. Qué quiere Dios? El bien o que uno elija el camino del bien? Quizás el hombre que elige el mal es, en cierto modo, mejor que aquel a quien se le impone el bien.

lunes, 21 de febrero de 2011

Crónicas de encierro - #2 Encierro

God, como necesitaba aire fresco. Parezco no sé, como encarcelada. Empiezo a caminar y recuerdo todo, cómo era el viento, el sol en la cara, el maldito pavimento, algún qe otro árbol en la vereda, es como qe cada vez qe entro a mi casa el mundo se pone en pausa para mi, y cuando salgo, "play" again. Creí qe la placita de Boedo iba a estar por la mitad, pero para mi sorpresa hay una parte muy grande terminada, genial. Y como era de esperar, gente qe no soporto ya se la adueñó...como hicieron con las calles y con el barrio en general. Los odio. Va a dejar de ser la Plaza Mariano Boedo para transformarse en LaA PlaciiTaaA Pioolaa de BoeDdo Bieen rOchaa... y un centro clandestino (o no tanto, según la policía qe lo maneje) de drogas. Qe asco me dan.
Y no puedo evitar ver las hamacas y qerer subirme, aunqe haya gente grande y chicos también mirándome. No los conozco, por lo tanto no me importa. Amo el olor a pasto, aunqe esto sea más sintético qe otra cosa, es pasto y me alegra un poco la tarde.
Sólo yo podría estar con más de 30° de calor, gorro de lana (sí, sí), sentada al rayo del sol (no hay sombra y no sé compartir espacios con gente qe no me agrada), escuchando BBKid y escribiendo esto, sólo yo. Pero obviamente aqellos qe no conocen el encierron no ansían libertad. Y está bien, pero para los qe, como yo, no sabemos qe hacer en vacaciones, no tenemos más colegio, la computadora quizás ya no sea tan divertida, tienen problemas con todas las personas qe compraten un techo, y, definitivamente, el temor más inmenso es hacer un currículum y tirarlo por algun lado, rezando qe no te llamen, lo más te despeja es esto: un banco en una plaza.
Odio cuando se empieza a poblar de gente, como ahora por ejemplo, sobre todo si son chicos. Sigo preguntándome si soy una atisocial de mierda o una cascarrabias de 70 años atrapada en el cuerpo de una de 18. Qe frustrante.
Es como todos los años. Encierro, encierro y más encierro. Y esta vez es diferente, porqe podría estar haciendo algo ¿productivo? por el mundo (o por el consumismo) y qe encima, encima! me pagaran por eso, pero no. No way. Prefiero esto. No es qe sea una vaga, espero no qedar así forever, pero I'm not ready, definitivamente, no puedo. No es qe no qiera ser independiente, es qe llegué a amar y a enteder al encierro, es como qe si no estoy metida en esto no spy yo. Definitivamente se volvió una parte de mi, una importante parte de mi. Y voy a tener qe lidiar con eso toda mi vida. Siempre tiendo al encierro. Es como un peqeño escudo de 4 paredes qe me protege (o eso creo yo), sé qe no hay peligro ahí adentro porqe lo conozco muy bien, desúés de tantos años, como para no conocerlo... y sé qe me va a sostener siempre (cuando de vueltas, me maree y me caiga, no voy a ir más allá del sueño, porqe no hay nada más qe objetos, muebles, cosas). Eso.
Y hasta llegué a pensar qe me lo merezco For what? No sé, pero lo merezco. Vengo a estos pagos porqe siempre tengo la esperanza de encontrar especímenes extraños como yo, no es qe qiera hacer amigos nuevos, sólo qe me gustaría poder jactarme de qe en mi barrio hay algo de "contracultura", por decirle de alguna manera, o simplemente qe haya gente qe valga la pena conocer, o algo! Algo.
Me perdí en propios pensamientos. Lo qe hay a mi alrededor me pierde, me distrae. Y está bien. Es el encanto de estar sentada haciendo nada, mirando el paso del tiempo. Amo perder tiempo, para mi noes tiempo perdido, JAMÁS. Es tomarse tiempo para hacer nada. Y creo firmemente qe la nada es algo.